Nueva Zelanda declara 81 millones de dólares estadounidenses para combatir la dependencia del juego

Nueva Zelanda: 81 Millones de Dólares para Combatir la Adicción al Juego

Descubre cómo el país está liderando la lucha contra los problemas del juego

Nueva Zelanda ha dado un paso impactante en la lucha contra la adicción al juego. Con una inversión de 81 millones de dólares, el gobierno busca proteger a los consumidores y reducir la dependencia del juego, un problema que afecta a uno de cada cinco neozelandeses a lo largo de su vida.

El Ministro de Salud Mental, Matt Dusi, confirmó que esta estrategia no solo se enfoca en la prevención, sino también en la evaluación constante de las medidas implementadas. «No basta con anunciar estrategias; debemos asegurarnos de que funcionen», afirmó Dusi.

Un enfoque integral para un problema creciente

La estrategia incluye:

• Contratación de especialistas: Se crearán 18 plazas adicionales en programas clínicos para formar profesionales en el tratamiento de la adicción al juego.
• Acceso a servicios de tratamiento: Se busca hacer más asequible la atención para quienes lo necesitan.
• Revisión independiente: En 2025/26, se evaluará la efectividad de las medidas implementadas.

«El mayor obstáculo para la recuperación es la falta de profesionales capacitados. Este plan aborda ese problema de raíz», destacó Dusi.

Financiamiento sostenible y protección al consumidor

Para financiar esta iniciativa, el gobierno ha establecido las Reglas Problemáticas para Recopilar Juegos de Azar, que obligan a empresas como Lotto NZ, Tab NZ y casinos a contribuir económicamente. Además, se ha implementado un proceso de consulta de dos etapas para garantizar que los recursos se utilicen de manera eficiente.

El objetivo es mantenerse a la vanguardia de las tendencias actuales, donde se estima que el 20% de los neozelandeses se verán afectados directa o indirectamente por la adicción al juego.

¿Qué significa esto para el futuro?

Esta inversión no solo busca resolver problemas actuales, sino también prevenir futuras crisis. Con un enfoque en la formación de profesionales y la mejora continua de las estrategias, Nueva Zelanda está sentando un precedente en la lucha contra la adicción al juego.

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